El mundo del marketing digital nos exige estar permanentemente atentos a todo lo que acontece. No perder de vista las tendencias, gustos y comportamientos de los usuarios es clave para poder dirigir las acciones y estrategias de marca con acierto. Y ese patrón relevante que descubrimos es, en ocasiones, el insight que necesitamos.
A menudo estamos ante pautas de comportamiento y acciones que se repiten de forma constante, y, sin embargo, no somos capaces de advertirlas, de entender por qué están ocurriendo. Descifrar ese significado oculto entre toda la nube de datos que disponemos nos brindará la posibilidad de dar un paso al frente en nuestro recorrido de marca.
Los insight en marketing son, precisamente, las claves que nos hacen vislumbrar la solución. La bombilla que, de repente, se enciende para descubrir un aspecto que se encontraba oculto. Una revelación que, sin duda, te brinda una gran oportunidad, pues permite que visualices ese porqué a una acción concreta. Es un indicador, una pauta, un detalle revelador que te permite crecer.
Lo cierto es que no hay una definición de manual que describa con claridad su significado. Podríamos estar un buen rato colocando adjetivos y palabras que abordasen la idea de lo que entendemos por insight. Sin embargo, ninguna descripción estaría totalmente en sintonía con su significado real. Por esa razón, la mejor forma de explicarlo es a través de un ejemplo:
Los juegos de escape (las famosas escape rooms) se han convertido en una de las actividades más recurrentes entre grupos de amigos, familias y colectivos como entretenimiento grupal. ¿Por qué? Seguramente por ser la novedad, porque prefiramos los juegos asociativos, nos entusiasme el misterio o simplemente porque disfrutamos con la implicación que este juego conlleva. Lo cierto es que la demanda de esta actividad de ocio se está incrementando cada vez más en nuestro país.
Como insight, la marca de cerveza Ámbar descubrió que los consumidores de este juego de escape eran en su mayoría el público objetivo al que ellos querían dirigirse. A partir de ahí, la asociación de ideas vino rodada. Su campaña de promoción consistió en representar una fábrica de cervezas de Ámbar en un escape room, para animar a los participantes a desarrollar la fórmula cervecera más preciada y así hacerles vivir una buena experiencia de marca.
El insight en este caso permitió conocer un fenómeno concreto y poder trasladarlo de forma efectiva a una iniciativa de marca.